Cuando se tienen múltiples deudas, de diferentes tipos y adquiridas con acreedores variados, la gestión puede ser difícil. Principalmente porque se corre el riesgo de no manejar las cuentas por pagar de forma adecuada, exponiéndose a cobros judiciales y, en los casos más graves, a embargos.
En medio de la actividad financiera, presentar dificultades para la gestión de deudas puede ser un factor común del que no están libres las personas, ni los autónomos, y mucho menos las empresas.
Preservar la gestión adecuada de deudas es primordial por varias razones, entre ellas: evitar el sobreendeudamiento, mantener un buen historial crediticio, planificar las finanzas de forma adecuada y proteger el patrimonio, entre otras.
Con esto en cuenta, un abogado de deudas se convierte en un aliado clave para proteger el patrimonio y guiar a las personas hacia soluciones efectivas a través de un adecuado asesoramiento financiero.
Como se mencionó al inicio, a veces la mala gestión de las deudas puede derivar en el cobro por vías judiciales, lo que incluye recibir demandas de cobro o enfrentar embargos. En estas circunstancias, el problema financiero se convierte en uno legal, lo cual requiere de protección especializada.
Al enfrentar situaciones de este tipo, se hace imprescindible contar con la asesoría de un abogado especializado en gestión de deudas. Por eso, en este artículo te explicamos 5 razones por las que se necesitan abogados para las deudas.
¿Por qué es esencial contratar un abogado para manejar tus deudas?
Cuando se tienen deudas y se presentan problemas con su gestión, los titulares de estas pueden experimentar una sensación de agobio o una experiencia abrumadora.
Cada contrato por el que se crea un compromiso de pago tiene sus propias condiciones, plazos, pagos de capital e intereses, por eso, poseer la asesoría de un abogado de deudas no solo es una opción inteligente, sino también beneficiosa.
Un profesional legal brinda conocimientos y estrategias que realmente pueden ayudar a solucionar la situación de endeudamiento. Como es sabido, la gestión adecuada de las deudas es fundamental para mantener una buena salud financiera, tanto a nivel personal como empresarial.
Ya que como se dijo antes, una gestión adecuada permite tener un buen historial crediticio, lo cual facilita el acceso a nuevos créditos con mejores condiciones.
También reduce el estrés, ya que ofrece un mayor control sobre las cuentas por pagar, permite una planificación a mediano y largo plazo, y minimiza el coste total de las deudas al evitar pagos atrasados con intereses por demora.
Con esto en mente, las cinco razones para contar con un abogado para manejar las deudas incluyen: la protección de los derechos del deudor, la defensa ante el acoso por parte de los acreedores, la búsqueda de opciones legales que faciliten el proceso, evitar consecuencias legales graves, contar con representación en procesos judiciales y obtener apoyo en la reestructuración de las deudas.
¿Qué funciones desempeña un abogado especializado en deudas?
Un abogado de deudas cumple una labor integral, orientada a resolver conflictos financieros de forma estructurada, legal y segura, mediante estrategias de asesoramiento financiero y legal.
Entre sus principales funciones está evaluar de manera integral la situación financiera de la persona. Esto implica revisar los pasivos, los activos disponibles y determinar el nivel de endeudamiento, para así contar con un margen de maniobra y asesorar en las mejores decisiones.
Durante esta revisión, el abogado puede identificar cláusulas confusas o intereses abusivos en los contratos, que podrían violar los derechos del cliente.
En esos casos, la persona puede alegar la vulneración de sus intereses y solicitar una reducción de la deuda total o incluso la nulidad del contrato en situaciones graves.
Otra función relevante es la representación legal del deudor, tanto en procesos judiciales como extrajudiciales, con un enfoque de protección legal del patrimonio del cliente.
Esto implica que el abogado debe velar por los intereses del deudor, impulsar medidas para proteger su patrimonio y reducir el riesgo de empeorar su situación económica.
El profesional en abogacía, también gestiona acuerdos con los acreedores, dentro o fuera del juicio, además, protege al cliente del acoso telefónico o por otros medios por parte de los acreedores.
Así mismo, actúa con rapidez ante posibles embargos de bienes o cuentas, y funge como puente entre acreedor y deudor para lograr negociaciones con acreedores eficaces.
En este proceso, analiza las mejores opciones para el deudor según su situación económica. Esto puede incluir quitas (reducción parcial de la deuda), refinanciación, o en casos de insolvencia, el acogimiento a la Ley de Segunda Oportunidad, una herramienta legal diseñada para dar una segunda oportunidad financiera a las personas físicas.
Evaluación integral de tu situación financiera
El primer paso crucial que realiza un abogado experto en gestión de deudas es llevar a cabo un análisis minucioso del panorama financiero completo.
Esto incluye una revisión detallada de: el monto total adeudado, la naturaleza de cada crédito (hipotecario, personal, tarjetas, etc.), de las fuentes de ingreso actuales, el valor de los activos y de las obligaciones financieras recurrentes.
Esta evaluación exhaustiva permite comprender la verdadera magnitud del problema de endeudamiento así como sentar las bases para diseñar una estrategia legal sólida, adaptada a la realidad económica que se tenga. Sin esta comprensión profunda, cualquier solución podría resultar superficial e ineficaz a largo plazo.
Representación legal en procesos judiciales y extrajudiciales
Cuando, debido a la mala gestión de deudas, una persona enfrenta cobros judiciales o debe establecer acuerdos con acreedores, el abogado actúa como su voz en el proceso.
Debe gestionar la comunicación de forma estratégica y proteger los derechos del deudor mediante una protección legal adecuada.
En este contexto, es clave que el abogado tenga experiencia en casos similares, o esté especializado en derechos del deudor y temas financieros.
Negociación y reestructuración de deudas en compañía de abogados para las deudas
Establecer una negociación con acreedores que resulte favorable, o realizar una reestructuración de la deuda, adaptando las condiciones pactadas a la nueva situación del deudor, es uno de los mayores logros que se pueden alcanzar con ayuda legal.
Un abogado de deudas puede acelerar estos procesos gracias a su experiencia previa, conocimiento legal y comprensión del caso particular.
En muchos casos, lograr este tipo de acuerdos por cuenta propia, es muy difícil incluso imposible, razón por la cual, la intervención del abogado es esencial.
Durante la negociación o reestructuración, el profesional puede conseguir una reducción significativa de los intereses, obtener nuevos plazos de pago, proponer planes más ajustados a la realidad económica, o plantear alternativas como la reunificación o la quita.
En el caso de empresarios o autónomos, un abogado puede ayudar a que la actividad económica continúe, ofrecer mayor calma a corto y mediano plazo, mantener la viabilidad del negocio y evitar que caiga en insolvencia.
En resumen, la contratación de abogados para las deudas es una inversión estratégica que permite a los deudores obtener tranquilidad, lograr acuerdos de pago que se ajusten a sus condiciones económicas actuales, defender sus derechos y acceder al conocimiento necesario sobre legislación para recuperar el control de su vida económica, incluyendo recursos como la Ley de Segunda Oportunidad.
Si necesitas asesoría para gestionar tus deudas, no lo pienses dos veces, y ponte en contacto con nosotros.
