¿Cuándo prescribe una deuda en España?

cuando prescribe una deuda en España
¡Entérate de los plazos de prescripción de deudas según su tipo!

Cuando se tienen deudas, y cada vez es más difícil pagarlas, se comienza a tener el temor de que serán como una bola de nieve que crece y crece, no se detiene, y se lleva todo consigo. Pero, no siempre tiene que ser así, porque estas pueden vencerse o cancelarse por sí mismas. Aquí te exponemos cuándo prescribe una deuda en España.

Plazos de prescripción según el tipo de deuda

El Código Civil de España establece que las deudas que, al momento de contraerlas, no determinaron un plazo para saldarlas, tienen un plazo no mayor a los cinco años para extinguirse.

Ahora bien, como hay diferentes tipos de deudas, ya hay unos plazos determinados para que prescriban algunas de ellas. A continuación, te presentamos un listado sobre las más habituales: 

  • Deudas hipotecarias: Las deudas hipotecarias, que son las que tardan más tiempo en prescribir, tienen un periodo establecido de 20 años.
  • Deudas con Hacienda: Prescriben a los cuatro años.
  • Deudas con la Seguridad Social: Al igual que las deudas con Hacienda, se cancelan a los cuatro años.
  • Deudas con entidades financieras: Si no se acordó un plazo específico en el contrato por el préstamo, las deudas con las entidades financieras prescriben a los cinco años.
  • Deudas de impuestos municipales: Este tipo de obligación vence a los cuatros años. Sin embargo, es posible que la presión del Ayuntamiento haga que deba buscar otra alternativa a la prescripción.
  • Deudas de multas: El artículo 112 de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial establece que este tipo de deudas vencen en un periodo de tiempo de cuatro años.
  • Deudas de préstamos no hipotecarios: Los préstamos bancarios no hipotecarios prescriben a los cinco años.
  • Deudas de tarjetas de crédito: Así como con los préstamos no hipotecarios, estas deudas se cancelan a los cinco años.
  • Cargas generadas entre 2000 y 2005: Para estos años se estableció un plazo de 15 años para que prescriba la deuda.
  • Alquileres, pensión y pago de servicios: Estas deudas, que pueden ser consideradas de los servicios más importantes del día, como el de la luz y el agua, prescriben a los cinco años.
Se puede interrumpir la prescripción de una deuda

¿Se puede interrumpir la prescripción de una deuda?

Así como puede prescribir una deuda comprobando que ya se cumplió con el plazo establecido para ello, efectivamente también se puede interrumpir este proceso. 

Para interrumpirse, se deben tener en cuenta ciertas condiciones que tienen que ver con el acreedor, quien debe mostrar interés de que la deuda sea saldada. Lo cual tendrá la posibilidad de hacer mediante acciones legales, extrajudiciales o judiciales. Por su parte, para que pueda interrumpirse, el deudor debió reconocer que tiene esta obligación pendiente.

Cómo interrumpir la prescripción

Como se mencionó anteriormente, para que la prescripción se detenga, el acreedor debe valerse de las vías legales, extrajudiciales o judiciales para reclamar el pago de la deuda (no puede ser declarada de oficio).

A partir de ese momento, el reloj parará, es decir, dejará de correr el tiempo para alcanzar la prescripción. Cabe mencionar que este proceso de cobro debe ser notificado al deudor, de lo contrario no tendrá efecto, pues se puede tomar como desinterés del acreedor por el pago de esta obligación.

¿Qué deudas no prescriben nunca?

Aunque la prescripción puede sonar como una muy buena opción para quienes acumulan deudas, no debe confiarse, pues no todas prescriben.

De acuerdo con el artículo 1965 del Código Civil, no aplica la prescripción a la división de herencia entre coherederos, división de la cosa común entre comuneros, el deslinde entre propiedades contiguas y el elevar a escritura pública un documento privado.

Cómo puedo eliminar mis deudas

Siempre es recomendable pagar las deudas antes de que te presionen para hacerlo o, incluso, embarguen tus bienes. Las siguientes son las opciones más habituales a las que recurren los deudores para eliminarlas:

Lógicamente, la forma más común es pagar la deuda, pero no todos cuentan con esa capacidad. Por ejemplo, quienes tienen pagos pendientes con la Agencia Tributaria o la Seguridad Social, recurren a la compensación, con la que el monto de dinero que se debe se compensa con una suma que recibe por la devolución del IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas).

Otra opción es la condonación, por medio de la cual el acreedor decide renunciar total o parcialmente al pago de la deuda para finalmente no enfrentarse a un impago (como en caso de muerte del deudor, si la obligación financiera se hereda a alguien, se puede llegar a acuerdos para tal figura).

Además, una de las alternativas más útiles es recurrir a la Ley de Segunda Oportunidad, que permite que, si cumplen con ciertos requisitos, tanto autónomos como particulares eliminen el 100 % de sus deudas.

Dentro de los requisitos básicos está el residir en España, declararse insolvente (que no puede pagar las deudas) y tener menos de 5 millones de euros de deuda.

Asimismo, debe tener dos o más deudas con diferentes entidades, no contar con antecedentes penales socioeconómicos, no tener infracciones administrativas graves y no haberse acogido a la Ley de Segunda Oportunidad en los últimos cinco años.

En resumen, las deudas en España sí prescriben, pero es muy difícil que ocurra, ya que es necesario que el acreedor no manifieste su intención de cobrar la deuda y con solo una notificación al deudor, el tiempo vuelve empezar a contar.

Si deseas saber más sobre cómo eliminar tus deudas, cuéntanos tu caso. Podemos brindarte la asesoría personalizada que necesitas.

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