¿Quién imaginaría real no tener que responder por sus deudas? Pocos lo creerían viable, pero en realidad sí es posible obtener el perdón de las deudas. Por eso te hablaremos acerca de cómo se accede ese beneficio y de qué manera se hace efectivo.
¿Qué es el perdón de las deudas?
El perdón de las deudas, también conocido como condonación, se refiere al acto jurídico en el que el acreedor le permite al deudor no pagar una parte o la totalidad de la obligación que contrajo con él, o sea que renuncia a su derecho de cobrarla y es como si esta ya no existiera.
Características de la condonación
La condonación de deudas tiene ciertas características, como que es un acto voluntario de los acreedores y no es un derecho que puedas reclamar, aunque sí es posible que se los propongas para negociar y llegar a un acuerdo que beneficie a ambas partes.
Pero, ¿por qué el acreedor tomaría una decisión como esa? En la mayoría de los casos es porque el deudor no tiene dinero para pagar la deuda, así que resulta más fácil perdonarle una parte de ella para no perder todo el monto o no embarcarse en procesos que requieran más esfuerzo, recursos económicos y humanos, y tiempo.
¿Quién puede perdonar una deuda?
A pesar de que en muchos casos los deudores intentan que se les perdone la deuda, la decisión de hacerlo es única y exclusivamente del acreedor, a menos de que haya de por medio una sentencia judicial o declaración de quiebra que dicte que deben condonarla.
Tipos de condonación
Hay diferentes tipos de condonación, que se diferencian por lo que las motiva. A continuación te contamos más sobre ellas:
Según la voluntad
El perdón de la deuda según la voluntad se puede clasificar en dos: condonación voluntaria, en la que el acreedor decide renunciar a su derecho de cobrarte el pago de esta; y la forzada, que se refiere a que el acreedor es presionado para hacerlo, generalmente por lo jurídico, como pasa en un concurso de acreedores.
Según la cuantía
Dependiendo del porcentaje de la deuda que no tendrás que pagar, se puede hablar en primer lugar de la condonación total, que como su nombre indica, es cuando te la perdonan completa y ya no tienes que responder por ella.
Luego está la condonación parcial, con la que sólo te perdonan una parte de la deuda y el restante sigues pagándolo en las mismas condiciones originales.
Según la forma
La condonación de la deuda se puede hacer de manera expresa, llevando a cabo un procedimiento judicial en el que un notario certifica que el acreedor renunció a su derecho de cobrártela, haciéndolo bajo la figura de donación, que tú debes aceptar.
Adicionalmente, se puede dar de forma tácita o presunta, o sea que no hay un acuerdo formal consignado al respecto, pero se presentan situaciones que dan a entender que se ha perdonado la deuda. Por ejemplo, si el acreedor no te sigue cobrando o recibes una carta en la que te avisan que ya no tienes que preocuparte por ella.
Según el momento en el que se realiza
También se puede clasificar la condonación según el momento de la vida en el que se realiza. Si esta tiene lugar cuando las partes están vivas, se le llama inter vivos; mientras que, si se da tras la muerte del deudor, es denominada mortis causa.
Según el ámbito
Si el perdón de la deuda se da entre particulares (deudores y acreedores son personas naturales o personas jurídicas), se habla de condonación privada. Por otro lado, está la condonación pública, en la que el deudor o el acreedor es la Administración pública de un país o el Estado.

¿Qué efectos tiene el perdón de la deuda?
Cuando se te perdona una deuda en su totalidad te liberas de la responsabilidad de pagarla y, por tanto, se extingue tu relación con el acreedor; mientras que, si la condonación es parcial, seguirá existiendo mientras que saldes la cantidad por la que debes responder.
Ten en cuenta que, en caso de que haya una obligación principal y unas obligaciones accesorias (como pueden ser los intereses de un préstamo), si te perdonan la deuda principal también se cancelan las accesorias, pero si accedes a este beneficio por una deuda accesoria, no se cancela la original.
¿Cómo se puede obtener la condonación de las deudas mediante la Ley de Segunda Oportunidad?
La Ley de Segunda Oportunidad (LSO) le permite a los deudores cancelar sus deudas a partir de la reestructuración de estas o su condonación con el BEPI, para que así puedan recuperar su estabilidad económica, ser eliminados de los ficheros de morosos y no ser embargados.
Para ello tienes que cumplir con requisitos como ser deudor de buena fe insolvente, no deber más de cinco millones de euros, no haber sido declarado culpable en el concurso y no tener antecedentes por delitos económicos y falsedad documental. Si quieres saber más sobre la LSO, ¡hablemos! O, si crees reunir lo que se necesita para acogerte y necesitas la ayuda de un profesional, visita nuestro comparador.
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